Bienvenida

Entras en un taller de poesía donde no hallarás ningún maestro; tan sólo un alumno con vocación de no dejar nunca de ser alumno.

19 mar 2012

Quién lo iba a pensar

Qué tiempos
                       aquellos
cuando creíamos ver todo
tan cuidadosamente ganado y conquistado
    
No hay invasión externa
no hay invasiones bárbaras, esta vez;
    
repugnantes vómitos  -sólo-
desde el hígado social:
    
cifras sin rostro elaboradas
por personas-robot supervisadas por
patanes en civilidad
y castrados en dialéctica,
pedestales de mando muy serviles
a bocas insaciables de poder y dinero.
    
Y ahora todos nosotros
                                        temiendo
                                                         acojonados
    
por no perder ese trabajo, tan necesario
ese bendito trabajo que lleva legumbres
a la mesa, sin ya pedir, siquiera
un compartir del ruido de cucharas
entre padres e hijos;
    
ese trabajo al que, sin embargo,
mercachifles de empresas, tecnócratas, corruptos...
de forma incomprensible han enseñado a odiar.
    

6 comentarios:

Eva dijo...

... y los Inocentes no son absueltos

Felicidades

Lapislazuli dijo...

Querido amigo, cuanta realidad en tus letras. El trabajo siempre es trabajo, aunque duela
Un abrazo

P MPilaR dijo...

Mayores verdades y mayores evidencias de corrupción de alta, mediana y baja frecuencia, Im po si ble!
Desesperante el panorama.

Anónimo dijo...

El miedo y el individualismo es la victoria de gobernantes y empresarios.
Un saludo.

ecos de ubeda dijo...

cuanta verdad

Cormorán dijo...

Y a pesar de estar bajo ese caballo fornido, alcanzaremos el palo, nos erguiremos y desmontaremos el poder de la cabalgadura.
Perderemos el trabajo y las legumbres, pero recuperaremos la dignidad. Podremos morir de hambre pero con orgullo.
La revolución no está tan lejos, nos impulsan hacia ella.
Un abrazo compañero